Los obispos mexicanos piden perdón a migrantes centroamericanos: “no los hemos tratado como personas”

obisposymigrantesEn un encuentro inédito en la frontera sur de México, del 28 al 30 de enero se reunieron en Tapachula (Chiapas), diócesis limítrofe con Guatemala, los obispos del sureste de México, así como los de Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador.

El obispo de San Cristóbal de las Casas (Chiapas), monseñor Felipe Arizmendi Esquivel, cuya diócesis es paso “obligado” de los migrantes, había explicado que el encuentro serviría a los obispos de la región ”para dialogar sobre la realidad siempre dolorosa” de la migración centroamericana.

Extorsiones y engaños

Los obispos de la zona se reunieron porque les preocupa que a tantos miles de migrantes que proceden de Centroamérica, en su paso por México, “los extorsionen, los engañen, los secuestren, los obliguen a trabajar para el negocio de la droga, los asesinen y les hagan imposible lograr su sueño”, según el propio monseñor Arizmendi Esquivel.

El encuentro entre los obispos de los cinco países expulsores de migrantes a Estados Unidos que concluyó ayer, ofreció talleres y diplomados en pastoral migratoria, para capacitar a personas que trabajan a los inmigrantes y que estos sean atendidos de acuerdo con su dignidad y sus derechos fundamentales.

En una parte emotiva del mismo, los obispos de los cinco países rezaron por los migrantes en las orillas del río Suchiate, que divide a México con Guatemala, y cuyo afluente cruzan diariamente cientos de indocumentados, tras un corto peregrinaje, acompañados por decenas de fieles, desde la iglesia de San Andrés Apóstol a la orilla del río, donde concelebraron Misa.

Uno de los mensajes centrales del encuentro fue el expresar, de manera conjunta, la necesidad de reformas migratorias entre los países de la región, especialmente México, para facilitar el paso de las personas y garantizar el respeto a sus derechos humanos.

“Es doloroso y triste que haya tratados para el libre comercio y que pasen las mercancías, pero no para que pasen los seres humanos. Es más importante el dinero, el negocio, las mercancías y para eso si hay tratados”, enfatizó monseñor Arizmendi Esquivel, quien con claridad remarcó: “Decimos que somos hermanos México y Centroamérica pero a veces es más de palabra que de hechos”.

Caminemos con Cristo migrante

Y por este hecho, los obispos mexicanos, en voz de monseñor Arizmendi Esquivel, pidieron perdón a los migrantes centroamericanos “porque no los hemos sabido tratar como personas”.

Por su parte, el arzobispo de Mérida, en el Estado mexicano de Yucatán, monseñor Emilio Berlié Belaunzarán, afirmó que “si Estados Unidos no quiere que vaya tanta gente a su país, que invierta en las naciones centroamericanas en actividades productivas, no de caridad”.

Más adelante, el prelado mexicano señaló que el sellamiento de la frontera entre México y Estados Unidos, no frenará el paso de los migrantes. “No digo que no se debe respetar (la frontera), pero si no se quiere que sigan las migraciones se tienen que generar inversiones en las comunidades, generar empleos y fortalecer las capacidades productivas”.

El encuentro, que tuvo como obispo anfitrión al obispo de la diócesis de Tapachula, monseñor Leopoldo González, se desarrolló bajo el nombre de “Caminemos con Cristo Migrante en el Mundo”.

Publicado en Aleteia