La época en que nos encontramos, posmoderna, permisiva y relativista, con su aguda crisis de valores y sin miras de trascendencia, ha sumido al ser humano en un sinsentido de vida, que muchas veces hace llamar «al mal bien y al bien mal», como ya había dicho el profeta Isaías. Este talante del «todo se vale,», pretende poner en entredicho la moral, la ley natural. Entonces si todo está permitido, no existe el pecado. Este es el pensamiento posmoderno. Si no hay pecado, sale sobrando el amor misericordioso de Dios, más aun, el mismo Dios «carece de sentido».
Actualidad del pecado
Con su libro, Los pecados capitales y la autoestima, el padre Juan Manuel Pérez Romero, del presbiterio queretano, viene a recordarnos que el pecado es una realidad presente en la vida de todos los hombres y mujeres de todos los tiempos, por más que se quiera ignorar. Y sus terribles efectos los padecemos en todos los niveles de la existencia.
Luego de presentar, uno por uno, los pecados capitales —soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza— va tocando conceptos como la autoestima, la conciencia, la libertad, de una manera por demás didáctica, con ejemplos tomados de lo que él mismo ve en su ministerio pastoral, con citas bíblicas y una serie de preguntas –sencillas y directas- que favorecen no sólo la reflexión sino la apropiación de los contenidos que propone.
Sin embargo el texto, más allá de ser una condena o una amenaza, tiene un feliz trasfondo: en todo él trasluce la misericordia de Dios que, sin olvidar la condición del hombre y la mujer, ama profundamente a cada uno e invita a la conversión, a «despojarse del hombre viejo, para revestirse del hombre nuevo».
El padre Pérez Romero sostiene que «la forma de vivir de Jesucristo, nuestro maestro y Señor, y sus enseñanzas nos impulsan a avanzar por el camino de la virtud, abandonando el del pecado. Con esta actitud fortaleceremos nuestra autoestima que nos permite crecer como personas, cultivando nuestra inteligencia emocional y siendo proactivos».
En medio de la confusión que reina en nuestra época posmoderna, llena de las luces de la tecnología y de la oscuridad del mal que obceca el corazón del hombre, este libro es una aceptable herramienta para volver a la conciencia de lo que es el pecado y los terribles efectos que tiene en la vida; una brújula para evitar la autodestrucción que proviene de los pecados capitales, y que invita a cultivar la autoestima necesaria para ser un buen discípulo de Jesús.
PÉREZ ROMERO Juan Manuel, Los pecados capitales y la autoestima, s.e., Querétaro, México, 2009, 104 págs.
