Ningún ser humano es superfluo

“¿Es usted superfluo?  Por supuesto que no.  ¿Y sus hijos?  De ningún modo. ¿Y sus parientes y amigos? Lo sé, la pregunta es casi impertinente.  Y, para ser sincero, yo tampoco me siento superfluo.  ¿Quién puede sentirse así?  A lo sumo, en días muy malos.  Sin embargo, es mucha la gente en este planeta considerada superflua desde la perspectiva de economistas, organizaciones internacionales y élites globales.  Quien no produce ni consume nada no existe”. Continuar leyendo

Miseria de la prosperidad

austeridadUtilizamos el nombre de un célebre libro de Pascal Bruckner para ejemplificar lo que queremos decir en el tema de la semana de El Observador: ante el espejismo del tener, la realidad brutal del consumo exagerado; la forma como la miseria de los objetos termina tragándose la felicidad austera de la misericordia.

Justo en este primer domingo de Adviento nos enfocamos deliberadamente a desentrañar los nudos de la publicidad que nos llena de cosa que no necesitamos y que terminamos pagando con dinero que no tenemosContinuar leyendo

Perdón

Todos los sabios que en el mundo han sido, guiados por la luz del Espíritu Santo (hablo de los sabios de verdad, no de los eruditos), coinciden en señalar que el perdón ofrecido y recibido con alegría nos sana, nos reintegra a la vida, nos da alas, nos hace ser lo que somos, ser de otro modo, ser más.

Navidad es el tiempo propicio para pedir perdón y para recibirlo de Dios. Continuar leyendo

Espera y esperanza

Llega la época más bella del año. Y no justamente por las luces, los regalos, las fiestas, sino porque el Hijo de Dios se nos hace presente de una manera dulcísima: en la figura de un niño recién nacido. De forma misteriosa, el Adviento nos muestra que «Dios no se ha retirado del mundo», como decía en un famoso ensayo el cardenal Joseph Ratzinger. Él está aquí, un niño pequeño, adorable, humilde. Él es la espera y la esperanza. Continuar leyendo