Muchos amigos lectores y amigos de lectores, se han unido, en el país y en el extranjero, a la campaña que propusimos la semana pasada desde El Observador. La idea era –y sigue siendo—indignarnos ante la barbarie, pero, sobre todo, unirnos a orar por México y a hacer algo (la fe sin obras está muerta) por los demás. En el “hacer algo” es en lo que me voy a detener esta vez.
Our Sunday Visitor acaba de editar el folleto “Los 10 secretos del Papa Francisco para la felicidad”. Creo que vienen muy bien en estas horas lúgubres que vivimos en México y nos dan diez pistas para “hacer algo” por la reconciliación en nuestro país y en donde quiera que tracemos un signo de esperanza como testimonio católico:
- Vivir y dejar vivir. 2. Darse a los demás. 3. Proceder con calma. 4. Desarrollar un sano sentido del ocio. 5. Hacer del domingo un día de precepto (y de la familia). 6. Crear empleos para los jóvenes. 7. Respetar y cuidar de la naturaleza. 8. Dejar de ser negativo. 9. Respetar las creencias de los demás. 10. Trabajar por la paz.
Dicen los editores de este decálogo: “cuando leemos entre líneas los diez secretos del Papa para la felicidad, encontramos la esencia del mensaje del Evangelio. Ciertamente, vivir como discípulos verdaderos de Jesucristo traerá esa clase de paz y felicidad interior profunda que jamás nadie nos podrá quitar”. Y yo agrego: la paz con justicia que México requiere. Una paz que debe venir aparejada de la oración. Le dejo a usted dos jaculatorias para recitarlas en tiempos difíciles como estos: Sagrado Corazón de Jesús, perdónanos y sé nuestro Rey / Santa María de Guadalupe, Reina de México, ruega por tu nación.
Publicado en El Observador de la Actualidad
