Celebramos en este número –junto a Nuestra Señora de Lourdes— la Jornada Mundial del Enfermo. Es al lado millones de personas en su lecho de dolor y sufrimiento, donde la Iglesia católica muestra su verdadera esencia: 26 por ciento de las estructuras de salud en el planeta son católicas y entre 30 y 70 por ciento de las instituciones hospitalarias en países de escasos recursos, son de origen cristiano.
En México una conspiración de rechazo a lo católico, proveniente del siglo XIX frenó la posibilidad de que continuara la historia de hospitales, dispensarios, lazaretos y beneficencias que habían florecido en los 300 años del virreinato y los primeros años de la Independencia. No por ello la Iglesia ha dejado de lado el anuncio, la celebración y la solidaridad con el enfermo. Miles de obras en todas las diócesis y provincias del país lo atestiguan.
El mensaje lo da San Giuseppe Moscati: todos los cristianos podemos auxiliar al enfermo. Primero que nada, orando por ellos. Su dolor es nuestro dolor. ¡Buena lectura!
Publicado en El Observador de la actualidad No. 1127