Los miedos, como las geografías y las modas, cambian de región en región. No se puede hablar de un miedo “universal” pues lo que para algunos es terrible, para otros, simplemente pasa desapercibido. Factor importantísimo de los miedos son los medios de comunicación.
Un reciente informe del Centro de Investigación Pew, da a conocer este hecho, que parecería una verdad de Pero Grullo, pero que, en realidad, marca la diferencia en muchas cuestiones de política, economía y defensa.
Este año 2014 ha estado cuajado de problemas internacionales. Desde el conflicto en Ucrania con los rusos, a las terribles escenas de decapitación terrorista y la política de “limpieza de los infieles” llevada a cabo por el ISIS en Siria e Iraq, a la creciente pandemia del ébola en África occidental, pasando por la debilidad de la economía europea, entre otras muchas crisis, han hecho a la gente estar más aprehensiva con respecto al presente y al futuro de su vida.
Sin embargo, en la primavera de 2014, antes de que estas contingencias sucedieran, el Pew realizó una encuesta en 44 países preguntándole a la gente cuál era la principal amenaza para el mundo que ellos percibían.
Estas son las cinco claves para entender qué teme el hombre de hoy y en qué áreas.
1. Enfermedades infecciosas y Sida, en lo más alto de los temores del África subsahariana. 2. Enfrentamientos religiosos y étnicos son el mayor peligro para quienes viven en el Medio Oriente. 3. Los europeos temen por la desigualdad. 4. En Estados Unidos, los republicanos y los demócratas tienen diferentes temores: la desigualdad (D) y el choque de civilizaciones (R) son los máximos miedos para unos y otros. 5. Los japoneses tienen temor a la proliferación (y uso) de las armas nucleares.
¿Qué es el miedo si no una conclusión compartida por muchos sobre un tema materializado por los medios de comunicación y vuelto política editorial por ellos mismos? El miedo destruye la convivencia y la solidaridad entre los pueblos. ¿Cuál es el principal miedo en México? Hoy por hoy la narco-política. Seguro.
Publicado en Revista Siempre!