La crisis que vivimos en esta cuesta de enero no es de antier. Viene de muchos años atrás. ¿Cuántos? Desde que la Revolución se bajó del caballo y se volvió institucional. Antes eran las balas las que arreglaban las cuentas. A partir de la década de los cuarenta del siglo pasado, son los planes, los mitos, las mentiras convertidas en verdades y las verdades convertidas en secretos.
En octubre de 1995, al recibir la Medalla Belisario Domínguez, el historiador mexicano Miguel León-Portilla advirtió, en presencia de los senadores y del presidente (Ernesto Zedillo) el riesgo que estaba corriendo México de “vivir de prestado”. Vivíamos –y vivimos—“de prestado”, mandando casi 30 millones de mexicanos a encontrar oportunidades de trabajo y vida digna a Estados Unidos. Continuar leyendo
El martes 12 de diciembre de 1531 “el sol venció a las tinieblas”, según la frase del padre José Luis Guerrero, refiriéndose al “nuevo nacimiento” de los pueblos indígenas del centro de México y su incorporación gradual a “la alianza nueva y eterna”, fruto de la última, decisiva, aparición de la Virgen de Guadalupe al “macehual”, al indígena pobre, Juan Diego Cuauhtlatoatzin (“El que habla como águila”).