El sacerdote Erasto Pliego de Jesús, desaparecido el fin de semana del poblado de Cuyuaco, en el Estado mexicano de Puebla, fue hallado este lunes completamente calcinado en el ejido de Nopalucan.
Según los informes de la policía, el cadáver del sacerdote, quien hace tres años que ejercía su ministerio en la arquidiócesis de Puebla, concretamente en la Parroquia de Santa María de la Natividad, Cuyuaco, estaba en un paraje del Camino a San Juan Bautista y El Silbato, en la colonia La Granja. Continuar leyendo
El próximo 12 de diciembre, cuando se celebre el 484 aniversario de las apariciones de la Virgen de Guadalupe a san Juan Diego en la colina del cerro del Tepeyac -donde actualmente se levanta la nueva basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México-, se dará a conocer en Roma el itinerario que seguirá el Papa Francisco en su primer viaje a tierras mexicanas.
En México, particularmente desde el principio del fin del “milagro mexicano” a fines de los setenta del siglo pasado, la migración a Estados Unidos es una de las constantes que viven las poblaciones tradicionales, sobre todo, las poblaciones indígenas.
“La mota (marihuana, en el argot mexicano) legal eleva la moral”, era una de las proclamas de los grupos consumidores que esperaban que la droga se legalizara en México. Y el día de ayer casi lo logran. Pero solamente para cuatro personas que se ampararon contra la prohibición absoluta de sembrarla para consumo personal.
Como una muestra de la vigencia de la fe frente al correr de la historia, un templo del siglo XVI, una joya colonial construida en pleno siglo de la conquista de México, de pronto ha emergido de las aguas del río Grijalva, en su ramal de alimentación de la presa Netzahualcóyotl, en el poblado nuevo de Quechula, en Chiapas (al sur del país).
Inició el tiempo de los independientes con “el Bronco” cabalgando por las calles de Monterrey, en el más puro estilo del México campirano de las películas de Pedro Infante.
En un par de ocasiones el Papa Francisco ha relatado la posibilidad de ir a México, previamente a entrar a Estados Unidos. En ambas ocasiones ha dicho, con absoluta claridad, que ir a México y no pasar a la Basílica de Guadalupe sería una bofetada.
La pasada ceremonia del Grito de Independencia trajo un inusitado fervor comunicativo —a través de redes sociales— de los asistentes a las plazas públicas donde se llevaron a cabo en estados y municipios, en delegaciones y jurisdicciones políticas del país.
La actividad política en nuestro país se ha enrarecido de tal forma que ya vemos “normal” que un gobernador deje abandonado al Estado para el que fue elegido por seis años completitos, e irse a servir a su jefe, el presidente. “Escaló” un peldaño, solemos decir. “Va para la grande”.
Monseñor Carlos Garfias Merlos, arzobispo de Acapulco (México), ha puesto en marcha, con la participación de más de cincuenta jóvenes de cinco parroquias focalizadas con el mayor índice de violencia en Acapulco, el primer taller de capacitación de los Equipos Parroquiales Animadores de los Centros Juveniles por la Paz.