El Papa Francisco ha ganado una batalla decisiva para situarse como un referente mundial para lograr la paz entre los pueblos. El pasado sábado protagonizó una jornada ecuménica, en el más amplio sentido de la palabra, para rezar por la paz en Siria y por detener la guerra en donde quiera que ésta se produzca.
“Quisiera dar las gracias a todos aquellos que, de una u otra forma, se unieron a la vigilia de oración y ayuno de ayer en la noche (por el sábado 7 de septiembre) Continuar leyendo