La revolución digital lo ha cambiado todo. Incluso la manera de conquistar —en la adolescencia— a la primera mujer, de enamorarse del primer hombre. El Tqm (te quiero mucho) lo simboliza a tope.
Gracias a los mensajes de texto, a las redes sociales y a la gama de productos de comunicación que tienen hoy los adolescentes a su alcance, las maneras de hacer contacto, cortejar, conquistar y relacionarse “románticamente” con el otro o la otra, han aumentado de manera exponencial, pero quizá nada más en eso. Quizás en profundidad humana todo se quede en la comunicación virtual.
El teléfono de la casa familiar o las notitas de pasada en los pasillos de la escuela han quedado como visiones de la prehistoria para los adolescentes de hoy, que ya no tienen ni idea de cómo escribir una carta, mucho menos una nota de cortejo.
Pero, vamos a ver: de acuerdo a una reciente investigación, realizada en Estados Unidos por el Pew Research Center, “algunas tradiciones románticas permanecen”. Por ejemplo, la vía más común de los adolescentes estadounidenses para pedirle una cita a una chica es hacerlo en persona por encima de un mensaje de texto.
Casi la mitad de las adolescentes (47 por ciento) aseguran que ellas prefieren que alguien las invite a salir personalmente, comparado con 6 por ciento de los chicos. Las mujeres son menos inclinadas que los hombres a pedirle salir a alguien, sea en persona (35 por ciento mujeres, 69 por ciento hombres) que vía mensajes de texto (20 por ciento chicas y 27 por ciento chicos).
Las redes sociales son una fuente importante de contactar con alguien y de profundizar en una relación romántica, pero esto es mucho más específico para los jóvenes varones que para las muchachas. Entre adolescentes con experiencias de relaciones de noviazgo o cercanas a ello, y que usan redes sociales, 65 por ciento de los chicos dijo que plataformas como Facebook o Instagram los hacen sentir “más conectados” con las fases significativas de la vida del otro, comparado con el 52 por ciento de las chicas.
Los hombres (50 por ciento) son más constantes en opinar que las mujeres (37 por ciento) que las redes sociales los hacen sentir “más conectados emocionalmente con su pareja romántica”.
Pero hay un lado negativo en lo que se refiere a las citas entre adolescentes por medio de redes sociales. Las chicas refieren, especialmente, una serie de escarceos inapropiados en este tipo de redes, con 35 por ciento de ellas que dicen que han tenido que bloquear avances de chicos que las hacen sentir incómodas. Es un poco más del doble que los chicos (16 por ciento).
Ciertamente, las modas y los modos han cambiado. Pero algo, seguramente, se ha perdido. Y quizá para siempre: la inocencia del mundo adolescente de antaño. ¿O no?
Publicado en Revista Siempre!
