En la presentación de las cartas credenciales del nuevo embajador de México ante la Santa Sede, Federico Ling Altamirano, el Papa Benedicto XVI fue más que claro al respecto del «caso México»: o hay una renovación moral en la sociedad mexicana, o la lucha contra el narcotráfico, el secuestro y el crimen se va a perder sin remedio. Continuar leyendo