Podemos ser “el nuevo continente”, poseer reservas naturales inmensas, capacidad de trabajo, mano de obra, ejemplos de superación, pero seguimos sumidos en la miseria moral que implica el crimen. En efecto, la situación económica, la desigualdad social, la corrupción y la droga han hecho que hoy mismo América Latina sea el continente con el mayor número de homicidios dolosos en el mundo: 36 por ciento de estos hechos de sangre se cometen en América. Continuar leyendo