Un nuevo fantasma recorre al mundo. El fantasma de la indignación. No se trata de un movimiento de jóvenes, o de desempleados, o de sindicatos, o de perdedores. Se trata de un movimiento neutro, que protesta contra la injusticia en todas sus variantes: financiera, en primer lugar.
Los ha creado el sistema neoliberal. Los ha puesto en la calle Wall Street. Los ha generado un modelo que ya tronó. Continuar leyendo