¡Paz!

El mensaje del Santo Padre Benedicto XVI para esta Jornada Mundial de la Paz no puede ser más claro: la libertad religiosa es el camino de la paz; si no se respeta el derecho humano universal a profesar —en público y en privado— la creencia religiosa de cada uno, el equilibrio de la humanidad está en peligro inminente de romperse. Y el cristiano es, hoy por hoy, el creyente más perseguido de todos.

Continuar leyendo